Estando tan solo a una semana de las Navidades, muchos andan como locos comprando cosas, encargando comida y cocinando mientras que yo, solo hago que pensar en sobrevivir a ellas. Reconozco que después de hacer el cambio de alimentación, las Navidades se han convertido en una serie de reuniones amigo-familiares en las que, obviamente disfruto, pero vivo en cierto estado de tensión debido al tema de la comida. El estrés de comprobar que nada lleve gluten y el intento de evitar comerme todo lo que cae en mi plato, me tienen bastante ocupada durante esos días. A mi, que me sienta bien comer poco y muchas veces a lo largo del día ¿podeis imaginaros como puede acabar mi sistema digestivo, después de comer, quizás 3 platos y un postre?? No hace falta decir que, generalmente en los tres platos, no hay ni rastro de algo verde cargadito de clorofila, you know, right??? No sé si en vuestras casas pasa lo mismo pero os aseguro que en mi casa las comidas de Navidad son lo más...
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